Sombras. Reflejos.


La noche se esconde y las mañanas son tan frías que los pies se hielan bajo la manta. Vuelve a ser un día azul. No hay nada mejor como escuchar Evanescene la mañana de un sábado frío y azul. Para matar tus miedos, sólo tienes que luchar contra ellos, mirarles a los ojos y adivinar todo lo que te quieren decir. Se esconden palabras en sus retinas, y el final de su espalda, de vez en cuando, te dedica un 'no temas'. Quiero que busques en mis rincones y resuelvas los misterios que esconde mi cuerpo. Ha quedado todo tan claro como el cielo. Y ten en cuenta, de que a veces, los miedos están infundados por sentido común.